Tener una óptima ventilación en invernaderos es una de las claves para lograr los resultados buscados en los cultivos. Estos sistemas tienen determinadas características y ofrecen unas prestaciones para cada necesidad, por eso en este artículo te contamos todo lo que debes saber sobre la ventilación adecuada en invernaderos.
Tener un sistema de ventilación eficiente en un invernadero de jardín garantiza altos rendimientos y buena calidad en el cultivo con el que se esté trabajando. Es que tanto la temperatura como la humedad son muy importantes para la producción de frutas y hortalizas y la ventilación es parte de la clave para el éxito de la cosecha.
Frente a las altas temperaturas y una humedad en exceso en el interior de los invernaderos, es imprescindible disponer de una buena ventilación en el invernadero para mitigar los efectos negativos de ambos factores y conseguir una campaña con grandes resultados.
- ¿Necesitan ventilación los invernaderos?
- Tipos de ventilación en invernaderos
- Ventilación de invernaderos con extractores
- Ventiladores de invernaderos a presión en las paredes frontales
- Sistemas de ventilación natural en invernaderos
- ¿Cómo ventilar un invernadero en invierno?
¿Necesitan ventilación los invernaderos?
Por las mañanas, tras salir el sol, el aire del invernadero se calienta pero el rocío de la noche queda pegado al fruto y la planta, pudiendo generar enfermedades.
La ventilación es necesaria en los invernaderos. Estos sistemas pueden evitar complicaciones y el deterioro de las plantas y sus frutos, al renovar el aire y sacar así el vapor de agua sobrante que se genera a partir de los fenómenos climáticos del calor del sol y el rocío de la noche.
Con la ventilación correctamente instalada, el aire circula, baja la humedad y la temperatura, por eso es necesario un buen sistema de ventilación cenital y/o lateral combinado.
Por ejemplo, a mediodía, durante los meses de verano, el aire debe circular de forma homogénea y limitar la subida de temperatura. Si el invernadero está mal ventilado no repartirá bien el CO2.
En el caso del invierno, la humedad se acumula en la cubierta interior y luego de condensar gotea en el cultivo. Para mitigar esto la gran mayoría de invernaderos cuentan con sistemas de ventilación en la cubierta del tipo cenitales o de techo y en sus laterales para permitir que entre el aire y contribuir a disminuir las altas temperaturas que se generan en el interior del invernadero.
Tipos de ventilación en invernaderos
Los tipos de ventilación en invernaderos se dividen entre la ventilación natural y mecánica. Además, los sistemas mecanizados pueden ser simples o húmedos.
A continuación vemos los tipos de ventilación de invernaderos que se utilizan en la actualidad.
Ventilar invernaderos con extractores
La ventilación de invernaderos con extractores es muy utilizada dentro de los sistemas de ventilación forzada.
El funcionamiento es el siguiente: el aire ingresa a través de la persiana motorizada y es arrastrado a través del invernadero por los extractores, los cuales deben tener la capacidad de mover pequeños volúmenes de aire sin corrientes de aire y proporcionar la ventilación adecuada para un intercambio de aire dentro de la nave de forma rápida durante el verano.
La ventilación de invernaderos con extractores se utiliza para invernaderos de hasta 40 metros de longitud, aunque también se implementa con éxito en sistemas de ventilación para invernaderos de hasta 80 metros de largo.
Las variaciones de temperatura son mayores cuanto mayor es el invernadero, por lo que es deseable una mayor tasa de ventilación.
Ventiladores de invernaderos a presión en las paredes frontales
Los ventiladores de invernaderos a presión en las paredes frontales son los más utilizados en estructuras pequeñas con ventiladores a presión.
Se usan para invernaderos de menos de 30 metros y se puede lograr mediante el montaje de ventiladores de presión que impulsan el aire en el invernadero, en la parte superior de los muros frontales. El sistema suele tener dos velocidades y están controlados por termostatos independientes.
Para evitar que el aire golpee las plantas, se instala un deflector delante de los ventiladores para dirigir el aire en la dirección deseada. Además, los ventiladores contienen una campana protectora que evita el ingreso de la lluvia al túnel.
También es posible hacer un sistema de ventilación por presión en el que se consigue el enfriamiento por evaporación. Para estos casos se deben colocar los ventiladores a presión en la pared lateral.
El sistema presurizado con ventiladores en la pared lateral no aporta un buen rendimiento cuando el follaje es denso y hay muchas plantas altas en crecimiento.
La salida y la entrada de aire están en el mismo lado de la caseta en este caso, con un recinto de caja alrededor del ventilador en el que se instalan almohadillas de refrigeración.
Sistemas de ventilación natural en invernaderos
Los sistemas de ventilación natural en invernaderos son básicamente las aberturas ubicadas de forma estratégica en la cubierta del invernadero. Se suelen ubicar tanto en su techo como en los laterales, y que pueden abrirse y cerrar de forma manual o mecánica de acuerdo a las necesidades del agricultor y la demanda de las plantaciones.
La composición básica de estos sistemas es la siguiente:
- Ventanas. Se trata de las aperturas y sus diferentes opciones como las abatibles, enrollables, de guillotina, entre otras.
- Mallas mosquiteras. Este elemento es el que actúa como anti insectos y anti pájaros. En general recubren las superficies de apertura para evitar que ingresen agentes externos que puedan perjudicar a los cultivos.
- Sistemas de tracción. Vienen para ser controlados de manera manual o mecánica y se utilizan para abrir y cerrar las aperturas: se trata de los herrajes, las poleas, los motorreductores, entre otros elementos.
- Instalación eléctrica. Para los casos en los que se utilicen sistemas mecanizados para la apertura de puertas y ventanas, es necesario contar con una instalación eléctrica acorde al sistema.
Ventajas de la ventilación natural en invernaderos
Las principales ventajas que tiene la ventilación natural en invernaderos se pueden enumerar de forma sencilla. A continuación las repasamos.
- Es una opción económica para la ventilación de todo invernadero.
- Para opción manual no es necesario usar electricidad, lo que se traduce en una reducción de costes de instalación, uso y mantenimiento.
Desventajas de la ventilación natural en invernaderos
Los sistemas de ventilación natural en invernaderos también tienen desventajas. Las mismas se pueden simplificar de la siguiente manera.
- Ofrecen muy poco control sobre el clima en el interior del invernadero.
- El agricultor tiene una mayor dependencia de las condiciones climatológicas externas.
Consejos para invernaderos con ventilación natural
Al construir un invernadero con un sistema de ventilación natural, hay que tener en cuenta una serie de particularidades para poder lograr una óptima instalación y lograr la eficiencia buscada.
A continuación presentamos algunos consejos útiles para realizar correctamente una ventilación natural en invernaderos:
- Es recomendable controlar la altura a la que están colocadas las aperturas de las paredes en función de los cultivos.
- Se debe incrementar el flujo de aire durante la noche para aprovechar el descenso de las temperaturas y eliminar el calor absorbidos por las estructuras y la cubierta.
- Instalar las aperturas de forma estratégica, de modo que se enfrenten para favorecer la generación de las corrientes de aire y de esta manera aumentar la aireación.
- Aprovechar al máximo la topografía para favorecer la redirección del flujo del aire hacia el invernadero.
¿Cómo ventilar un invernadero en invierno?
Para lograr una eficiente ventilación del invernadero en invierno hay que diseñar el sistema que evite golpear con las corrientes de aire frío las plantas.
Este es el principal problema con algunos sistemas que utilizan persianas en un extremo del invernadero y un ventilador de extracción en el otro. Para minimizar la situación se puede colocar la entrada en lo alto del frontón y utilizar deflectores para desviar el aire entrante, como se mencionó anteriormente.
Para la ventilación sin corrientes de aire se puede utilizar el sistema de tubos de convección. Esto consiste en extractores y entradas de aire fresco situadas en el frontón y en la pared final.
Consiste en conectar un tubo fino de plástico que se extiende a lo largo del invernadero. Este tubo está suspendido en un cable cerca de la cumbrera y tiene orificios a lo largo de toda su longitud y de esta forma aportar el aire correspondiente. En tanto que los ventiladores son controlados termostáticamente.
El ventilador produce una ligera caída de la presión del aire dentro del invernadero, lo que hace que el aire fresco fluya hacia la entrada e infle el tubo, que emite el aire en el interior por medio de los agujeros del tubo.
Los orificios que entregan el aire deben proyectarse horizontalmente para una distribución y mezcla adecuadas con el aire caliente antes de llegar a las plantas.
El trabajo que realiza el termostato es detener los ventiladores cuando se alcanza la temperatura deseada; el tubo se colapsa y la ventilación se detiene.
Cuando se trata de un invernadero de construcción hermética la ubicación de los ventiladores en la ventilación es por tubos de convección. En esos casos se requiere menos capacidad de ventilación que cualquier otro sistema de ventilación de invierno.
A medida que la temperatura exterior aumenta se necesita aire adicional, hasta el punto en que se alcanza la capacidad total del tubo.
Es posible sumar ventiladores y hasta combinarse con un panel de refrigeración para su uso en la refrigeración por evaporación. El aire puede hasta ser arrastrado a través de la almohadilla con o sin agua en la almohadilla.
La solución para lograr ventilaciones eficientes y adecuadas para cada cultivo es instalar invernaderos de jardín, como el invernadero minitúnel de Fertri. Un invernadero ideal para quienes se inician en el mundo de la agricultura, también ofrece las prestaciones necesarias en pequeñas parcelas a partir de su pequeño tamaño y resistencia estructural.
Otra opción que permite cultivar en cualquier momento del año bajo las distintas condiciones climáticas, es el invernadero de túnel paredes rectas de Fertri. Se trata de un de fácil instalación que no necesita mantenimiento y es muy resistente. Se trata de una estructura perfecta para lograr una óptima ventilación en todas las condiciones geográficas y de clima.