Los invernaderos con cubierta de policarbonato se han hecho cada vez más populares. Y no es de extrañar ya que sus propiedades lo han convertido en un material común en elementos como gafas, piezas de autómoviles, fabricación de paneles térmicos…
Unas características que les permiten ofrecer una serie de ventajas frente a otros invernaderos más ‘tradicionales’, tal y como te detallamos a continuación.
- Qué tipos de policarbonato para invernadero existen
- Ventajas del policarbonato en invernaderos
- Buena distribución de la luz
- Resistente a los impactos
- Muy ligero y moldeable
- Más duradero que los plásticos
- ¿Tiene algún inconveniente?
Qué tipos de policarbonato para invernadero existen
Existen en el mercado dos tipos de cubiertas de policarbonato para invernaderos: las fabricadas con policarbonato celular y las de policarbonato omega.
El policarbonato celular
Este policarbonato es liso y presenta una cámara de aire entre la pared interior y exterior, con una división alveolar en su interior.
El policarbonato celular está disponible en diferentes grosores, en invernaderos muy pequeños se utiliza el de 4mm y ya para invernaderos grandes profesionales se utiliza normalmente 6 o 10mm. Normalmente en invernaderos de techo curvo sólo se puede utilizar en el perímetro, ya que este policarbonato tiene problemas para curvar, aunque sí que es cierto que dependiendo del espesor del policarbonato celular y del tipo de arco elegido se puede llegar a montar en el techo, habría que consultarlo para cada caso particular. FERTRI ya lo ha instalado en el techo de algún invernadero en obras singulares.
El policarbonato omega
Se trata del tipo de material más utilizado, tanto para los recubrimientos laterales de invernaderos como para las cubiertas.
Se presenta con una secuencia de onda, plano, onda, algo que permite una mayor facilidad de instalación. Este tipo de cubierta puede encontrarse en transparente (es el más habitual), en blanco hielo y en color blanco opaco.
Ventajas del policarbonato en invernaderos
Sin duda la cubierta es una de las partes más importantes de un invernadero para el crecimiento de plantas y cosechas.
Por eso debe ser eficiente distribuyendo la luz, ligera, duradera, resistente a los impactos… unas cualidades que encajan a la perfección con las propiedades del policarbonato.
Buena distribución de la luz
Con el policarbonato se consigue un filtro natural de los rayos UV que, a la vez, permite la entrada máxima de la luz, algo fundamental para el crecimiento de la cosecha.
Una de las propiedades de este material es que distribuye la luz de forma uniforme por todo el invernadero, evitando que se concentre con gran intensidad en puntos concretos y, por lo tanto, reduciendo los riesgos de quemaduras en los cultivos (siempre y cuando utilicemos policarbonato hielo, que difumina la luz).
Los especialistas recomiendan que haya menos del 25% de luz directa y más del 70% de luz difusa, algo para lo que el policarbonato hielo es un material ideal que, además, ayuda a ahorrar en iluminación artificial dentro del invernadero y contribuye a una mayor retención del calor.
Resistente a los impactos
Los retos a los que debe enfrentarse un invernadero no siempre son sencillos: piedras, granizo, golpes involuntarios con herramientas y maquinaria…
Y lo cierto es que los invernaderos con placas de policarbonato son realmente interesantes en este apartado.
¿La razón? El hecho de ser un termoplástico flexible, y elástico en caso de impacto. Eso le permite deformarse al recibir un impacto, para volver inmediatamente a su forma original sin romperse.
De hecho, su resistencia es 250 veces mayor que el vidrio y 30 veces más que el acrílico puro.
Muy ligero y moldeable
El policarbonato tiene además dos grandes beneficios: es muy ligero y moldeable.
Esto facilita su instalación en invernaderos y también su transporte. A diferencia de otros materiales como el vidrio, el policarbonato celular es 12 veces más ligero. Eso aporta una serie de beneficios a la cubierta:
- Ser ligeras y resistentes.
- Que puedan adaptarse al material de la cubierta.
- Ser económico y de fácil conservación.
Más duradero que los plásticos
El policarbonato tiene alta duración comparado con los plásticos de cubierta. Se trata de un material con una muy buena resistencia al viento, granizo y que soporta temperaturas de -40°C hasta +120°C.
Existen láminas que además tienen capas especiales de disipación de agua que previene la formación de gotas en la parte baja del techo. De esta forma se evita el goteo en condiciones de humedad que afectan en general a los invernaderos.
¿Tiene algún inconveniente?
Aunque como material presenta múltiples ventajas, lo cierto es que tiene un inconveniente: implica una mayor inversión que las cubiertas de plástico a la hora de instalarlo, pero si hacemos números a medio plazo, una cubierta de policarbonato sale más económica con los años en mantenimiento, ya que el plástico se cambia cada menos años que el policarbonato, por lo que, a pesar de precisar una mayor inversión inicial, a medio plazo se amortiza al tener que cambiarla cada bastantes más años que el plástico.
Por otro lado, el montaje debe realizarse por instaladores profesionales, ya que un correcto sellado es fundamental para evitar que entre agua, suciedad y humedad en el interior.